El presidente de Portugal, Antonio Cavaco Silva, inicia hoy una visita de cuatro días a Brasil para asistir a las celebraciones de los 200 años del traslado de la Corte portuguesa a Río de Janeiro, y relanzar la relación entre los dos países.
Cavaco Silva permanecerá en Río hasta el 9 de marzo, como invitado especial del presidente Luiz Inácio Lula da Silva a los diferentes actos en honor a una fecha que cambió el destino del Brasil y de la Península Ibérica.
La Corte Portuguesa permaneció en Río durante 13 años y la pequeña ciudad tropical de naturaleza exhuberante fue elevada al estatus de capital de uno de los imperios más poderosos de su tiempo y de sus colonias.
Para celebrar ese legado los ministerios de Cultura de Brasil y Portugal organizaron un extenso calendario de celebraciones, con la participación de instituciones gubernamentales, de entidades civiles y privadas, destacó la Cancillería brasileña.
Mañana viernes los dos presidentes inaugurarán en la sede del Museo Histórico Nacional la exposición "Un nuevo Mundo un nuevo Imperio- La Corte Portuguesa en Brasil".
La Corte del Príncipe Regente Joao VI desembarcó el 8 de marzo en Río de Janeiro, semanas después de haber llegado a Salvador de Bahía huyendo de las tropas de Napoleón Bonaparte, que se disponían a ocupar Lisboa.
Según ha informado el Gobierno de Portugal, Cavaco Silva va a defender el refuerzo de las relaciones bilaterales y una acción conjunta con Brasil en la escena internacional.
"Voy a participar en las celebraciones con una idea firme de que la mejor forma de valorar el pasado es hacer de él una inspiración para un proyecto futuro", dijo Cavaco Silva en un mensaje de la Presidencia de Portugal.
Esta semana el portavoz de la Presidencia de Brasil, Marcelo Baumbach destacó que la esencia del encuentro presidencial es cultural, para darle el mayor prestigio a las celebraciones, pero la dinámica relación bilateral y comercial entre los dos países también podrán ser discutidos.
Los presidentes también participarán en una sesión solemne del Real gabinete Portugués de Lectura, fundada en 1837 y que guarda el mayor acervo de autores portugueses fuera de Portugal, con unos 400.000 libros.
Cavaco Silva permanecerá en Río hasta el 9 de marzo, como invitado especial del presidente Luiz Inácio Lula da Silva a los diferentes actos en honor a una fecha que cambió el destino del Brasil y de la Península Ibérica.
La Corte Portuguesa permaneció en Río durante 13 años y la pequeña ciudad tropical de naturaleza exhuberante fue elevada al estatus de capital de uno de los imperios más poderosos de su tiempo y de sus colonias.
Para celebrar ese legado los ministerios de Cultura de Brasil y Portugal organizaron un extenso calendario de celebraciones, con la participación de instituciones gubernamentales, de entidades civiles y privadas, destacó la Cancillería brasileña.
Mañana viernes los dos presidentes inaugurarán en la sede del Museo Histórico Nacional la exposición "Un nuevo Mundo un nuevo Imperio- La Corte Portuguesa en Brasil".
La Corte del Príncipe Regente Joao VI desembarcó el 8 de marzo en Río de Janeiro, semanas después de haber llegado a Salvador de Bahía huyendo de las tropas de Napoleón Bonaparte, que se disponían a ocupar Lisboa.
Según ha informado el Gobierno de Portugal, Cavaco Silva va a defender el refuerzo de las relaciones bilaterales y una acción conjunta con Brasil en la escena internacional.
"Voy a participar en las celebraciones con una idea firme de que la mejor forma de valorar el pasado es hacer de él una inspiración para un proyecto futuro", dijo Cavaco Silva en un mensaje de la Presidencia de Portugal.
Esta semana el portavoz de la Presidencia de Brasil, Marcelo Baumbach destacó que la esencia del encuentro presidencial es cultural, para darle el mayor prestigio a las celebraciones, pero la dinámica relación bilateral y comercial entre los dos países también podrán ser discutidos.
Los presidentes también participarán en una sesión solemne del Real gabinete Portugués de Lectura, fundada en 1837 y que guarda el mayor acervo de autores portugueses fuera de Portugal, con unos 400.000 libros.
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